De forma general, en cualquier negocio de hostelería es muy importante determinar el correctamente el equipamiento de lavado para la cocina; normalmente son tres los factores que vuelcan la balanza hacia un elemento u otro: la calidad en sí del lavado y de las propias máquinas, el dimensionado de esas máquinas en cuanto a tiempo y calidad del lavado, en función de las necesidades del cliente, y el precio de las mismas.

El primer factor, la calidad del lavado se encarga de buscar un lavado perfecto, para ello será necesario:

  • buena calidad de la máquina
  • buen tratamiento del agua para la misma máquina (sistemas de descalcificador o/y osmosis)
  • detergentes y abrillantadores de buena calidad

Otro aspecto, cada vez más clave en la elección es el ahorro energético, por lo que se ha de tener en cuenta que las máquinas de lavado es uno de los equipamientos de cocina que funcionan durante más tiempo a lo largo del día y los que más actividad tienen durante todos los servicios. Por este motivo, el ahorro energético y el ahorro en agua es vital.

Como consecuencia del párrafo anterior, los sistemas de limpieza de cocina han avanzado cada ver más, priorizando la calidad y el sistema de limpieza más adecuado para cada equipamiento, consiguiendo que la tarea diaria de lavado sea mucho más sencilla, rápida y cómoda, siendo los sistemas de lavado en auge: el túnel de lavado y el de capota para el lavado específico de vajilla y cristal, y el lavautensilios para la zona de plonge.

Pero, ¿cuál es la tendencia hacia el futuro? Cada vez más los sistemas de lavado están más y orientados al ecodiseño y a la sostenibilidad del medio ambiente. En Azero, le ayudaremos en la selección de este equipamiento.